Contaminación del aire en Cali. Foto tomada de www.caracol.com.com
Una alerta por contaminación del aire en ciudades colombianas se ha generado en capitales como Bogotá, en donde la situación se ha visto agudizada por los vientos cargados de material particulado, arrastrados de la región del Guaviare y la Orinoquía, como consecuencia de los incendios forestales, según se dio a conocer por varios medios nacionales de prensa.
Al material traido por causa de los incendios se suma el aumento de carbón negro, un contaminante que es generado por los vehículos y las quemas.
La situación es de tal gravedad que la administración distrital ha solicitado el uso permanente de tapabocas en los espacios abiertos, el control para realizar actividades físicas al aire libre, y la implantación de medidas en el transporte, que implicaría la suspensión de la ciclovía mientras se alcanza una mayor limpieza del aire.
Si por Bogotá es grave en Cali no es mucho mejor
Luego de este hecho que deja en alerta máxima a las autoridades ambientales y de salud de Bogotá, en Cali también se dieron otros pronunciamientos, luego del último comunicado del Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente Dagma, según el cual, cinco de los nueve medidores de calidad del aire con que cuenta Cali registraron sus mediciones por encima de los niveles considerados como saludables.
En este sentido la Organización Mundial de la Salud OMS, establece que cuando el Índice de Calidad del Aire ICA está por encima de los 35 puntos, esto debe empezar a producir preocupación.
En el resultado que dejaron los medidores, los niveles de mayor contaminación del aire fueron registrados en las estaciones de Obrero con 57 puntos, Univalle con 58 puntos, Compartir con 60 puntos,Transitoria, cerca a Calipso con 62 puntos y la Flora, con el índice de contaminacíon más elevado que llegó a los 72 puntos.
Además de las quemas y el humo de los vehículos, cabe anotar que según un estudio de Neftalí Jiménez Restrepo, de la Maestría en Ingeniería Ambiental de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) sede Manizales, dado a conocer en el 2019, "en Cali el contaminante que se emite a la atmósfera en mayor proporción es el dióxido de carbono (CO2) con 152.590 toneladas al año (generado en mayor cantidad por los combustibles fósiles), seguido de los COV (Compuestos Orgánicos Volátiles) emitidos mayormente por las chimeneas industriales, que aportan 5.163 ton/año y los óxidos de nitrógeno 124 ton/año", (liberados especialmente por vehículos motorizados).
De acuerdo a este estudio: "el aporte de CO2 se genera especialmente por el uso elevado de gas natural en las fuentes estacionarias puntuales, ya que el 70 % de los sectores evaluados lo consume, mientras el 20 % usa carbón y un 10 % ACPM".
De otro lado hay un déficit de al menos medio millón de árboles en Cali y, cada vez que se urbaniza y construye en los sectores de población de menores recursos, se piensa primero en el asfalto antes que en los árboles.
Asi mismo los estándares internacionales, que se determinan por medio del Índice de Calidad del Aire (ICA), indican que cuando un medidor marca de 0 a 50 puntos en la escala, la calidad es buena. Cuando va de 51 a 100, es moderada y hay que empezar a tomar precauciones.
Cuando la medición da entre 101 y 150, la contaminación es perjudicial para ciertos grupos sensibles, como personas con dificultades respiratorias o cardiovasculares.
Las tres categorías restantes generan serios riesgos de salud para las personas. Entre los 151 y los 200 puntos, la calidad es dañina; de los 201 a los 300 es muy dañina, y desde los 301 puntos hasta los 500, es peligrosa.
De acuerdo a la actualización del estudio del año 2015, que realizó el Departamento de Planeación Nacional DNP, los costos totales en la salud, asociados a la degradación ambiental, ascienden a $20,7 billones, equivalentes al 2,6 % del PIB del año 2015 en Colombia, relacionados con 13.718 muertes y cerca de 98 millones de síntomas y enfermedades.
Costos en los que la contaminación del aire urbano aportó el 75 %, con $15,4 billones, (1,93 % del PIB de 2015) asociados a 10.527 muertes y 67,8 millones de síntomas y enfermedades, según información del Departamento Nacional de Planeación (DNP).